En el distrito El Bermejo, el municipio avanzó y culminó el asfaltado de las calles internas del barrio Nueva Alborada, que eran totalmente de tierra. En este caso, se intervinieron seis arterias: Juan Gilberto Funes, las tres vías perpendiculares a Dante Alighieri ubicadas hacia el norte y las dos que se extienden hacia el sur.
En cada una, los trabajos implicaron un paso a paso necesario dadas las condiciones existentes. Primero, se excavó el terreno en unos 25 centímetros de espesor, a fin de poder construir la base estabilizada. Luego, siguieron las tareas de humectación, compactación, perfilado, nivelación e imprimación con un componente adhesivo. Por último, se distribuyó en caliente una capa de concreto asfáltico. Todo se llevó adelante gracias a la disposición de recursos, materiales, operarios de la comuna y equipamiento del moderno parque automotor local. Se trata de un esfuerzo y de una inversión permanente en pos de seguir optimizando el entramado vial de Guaymallén.
Este salto de calidad permite dejar atrás el molesto polvo en suspensión y la dificultad para transitar, sobre todo en días de lluvia, porque las calles se cubrían de barro y se formaban pozos y baches.
Así fue proceso de recuperación del vecindario
Vale mencionar que estas mejoras, ya finalizadas, completan la recuperación del barrio que se realizó paulatinamente y hoy es integral.
En el 2017, se renovó y extendió la red de agua potable con el aporte conjunto de los vecinos, la comuna y AySAM. La idea fue reemplazar las cañerías antiguas, que en algunos sectores no cumplían las normas de seguridad, y brindar agua potable a todos los habitantes mediante las conexiones domiciliarias correspondientes.
Posteriormente, se realizaron nuevos drenajes en la calle principal del vecindario, continuación de Dante Alighieri, y en Cerro Mercedario. Una vez terminadas las infraestructuras hídricas, y como eran de tierra, ambas fueron pavimentadas. Así, se optimizaron todas las opciones de acceso a esta zona transitada.
Durante el año pasado, se retomó la construcción de cordones, cunetas y banquinas para completar todas las vías perpendiculares a Dante Alighieri que tenían acequias de tierra. De forma complementaria, la urbanización incluyó alcantarillas en los cruces, remodelación de esquinas, puentes peatonales y vehiculares para los frentistas del tramo.
En este caso, también deben mencionarse las intervenciones concretadas en la calle Victoria, en las inmediaciones del nuevo puente que conecta esta vía con Dante Alighieri y que se eleva sobre el canal Lagunita. En el lugar, se realizaron tareas de limpieza, ya que era habitual observar basurales a cielo abierto; también, se concretó un empalme de la red de agua, se construyeron desagües y se pavimentó la calzada.