Esta semana, la recuperación que encara el municipio con recursos propios llegó al distrito Dorrego para intervenir el pasaje Guzzante, desde Remedios de Escalada hasta su tope este. La calle presentaba un suelo natural deteriorado, es decir, con piedras y ripio. Se trata de una condición que debe ser revertida para garantizar una circulación vehicular adecuada y mejorar la calidad de vida de los frentistas.
La calzada tuvo que realizarse de cero. Por lo tanto, los trabajos implicaron limpieza total de la superficie, conformación de la subrasante, compactación, imprimación y, finalmente, distribución de una capa de concreto asfáltico en caliente. Previamente, las cuadrillas instalaron la red de agua potable, un hidrante y un caño de desagüe pluvial para cada domicilio, teniendo en cuenta que la arteria es angosta y no permite la ejecución de cunetas. A esto se sumó la construcción de la línea de banquinas, que también pueden utilizarse como veredines.
La obra estuvo a cargo de operarios de la comuna y se realizó con la moderna maquinaria del parque automotor local. La flota en constante ampliación, sumado al buen orden y a metas claras, son factores fundamentales para poder seguir avanzando con obras de calidad. Estas tareas continuarán replicándose por las calles más deterioradas de Guaymallén, a través de un proyecto plurianual, de acuerdo a las prioridades que se determinen.
