El 9 de julio de 1816, Argentina declaró su independencia de la monarquía española en la casa de Tucumán. 119 años después, esa misma provincia vio nacer a la entrañable Mercedes Sosa, la cantante del «jardín de la República». Por eso, en homenaje a estos acontecimientos, el municipio realizó dos flashmob en el patio de comidas de La Barraca Mall.
Un flashmob es una expresión artística urbana que irrumpe súbitamente en un espacio público para sorprender a los transeúntes del lugar.
Bajo esta modalidad, la música en vivo se hizo presente con un repertorio variado. Por empezar, resonaron las estrofas del Himno Nacional junto a la agrupación Guaymallén Coral, dirigido por Javier Rodríguez, y a las voces líricas de Alejandra Marengo, Marcelo Muñoz, Patricia Milani, Javier Rodríguez y Julio Fiore. La puesta incluyó la participación del Ballet Municipal, a cargo de Eduardo Terrazas. Seguidamente, comenzó el homenaje artístico a la gran cantora argentina. Fue de la mano del dúo Nuevo Cuyo, formado por los hermanos Gustavo y Guillermo Micieli, que oportunamente compartieron con Mercedes Sosa el tema musical Zamba de los Adioses, en el álbum Cantora.
Las dos intervenciones fueron transmitidas en vivo en la cuenta oficial de Facebook de la Municipalidad de Guaymallén, y pueden revivirse ingresando a https://fb.watch/6EhXgatR_n/ y
El grito sagrado ¡Libertad!
El 9 de julio de 1816, el Congreso de Tucumán firmó la ruptura de los vínculos de dependencia política con el imperio español, declarando formalmente la ansiada Independencia Argentina. Diez días después, también renunció a toda otra dominación extranjera. En paralelo, el General San Martín preparaba su Plan Continental para cruzar Los Andes con su ejército a caballo, a fin de asegurar la soberanía nacional y continuar con esta expedición libertadora hacia Chile y Perú. Por eso, y como reza el Himno Argentino, desde ese grito sagrado de libertad debe homenajearse a todos aquellos hombres, hoy recordados como próceres de la historia, que lucharon por estas circunstancias para legar un país, una identidad y un ejemplo.
«Nací para cantar, vine del norte, el viento trajo mi voz»
Mercedes Sosa nació el 9 de julio de 1935 en la provincia argentina de Tucumán. Siempre fue una figura que perteneció al mundo y, especialmente, a Guaymallén porque esta fue la tierra que la acogió, donde formó su familia y desde donde se convirtió en la madre del Nuevo Cancionero Cuyano junto a grandes artistas como Armando Tejada Gómez, su compadre; Oscar Matus, su marido; y Tito Francia.
En verdad, en el departamento, el homenaje es permanente: sus cenizas fueron arrojadas en las aguas del canal Cacique Guaymallén; el escenario del tradicional Festival Provincial del Camote lleva su nombre, desde allí compartió su inconfundible talento en la edición 2011; y fue el eje de la fiesta departamental de la Vendimia 2020 denominada «Vendimia de la voz latinoamericana», que tuvo como invitada especial su nieta, Araceli Matus.
Su trayectoria es realmente extensa, con más de 40 discos grabados, múltiples colaboraciones con otros artistas de renombre, giras internacionales y numerosos premios y distinciones. Por mencionar algunos, fue declarada Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires y de Tucumán; en 1989, fue condecorada por el gobierno de Francia; en 1996, la UNESCO le concedió el Premio de la Música; la Revista Rolling Stone eligió su álbum «Corazón libre» (2005) como el mejor disco folclórico del año publicado en Argentina; recibió varios Grammy Latino y el Premio Clarín como La Figura Folclórica del Año. Lo importante es que la obra de «La Negra», como se la conocía, sigue intacta y con una valoración que permanece sin límite de tiempo.