En el distrito Pedro Molina, el municipio intervino la calle Francisco de la Reta para optimizar los servicios y las condiciones de transitabilidad de la arteria. La obra se extendió desde el cruce con Pedro Molina hasta Aristóbulo del Valle.
A lo largo de esos metros, las tareas se realizaron de abajo hacia arriba. Primero, se concretó el recambio de cañerías, teniendo en cuenta el estado crítico de las instalaciones sanitarias existentes: eran de asbesto cemento, un componente obsoleto, y habían cumplido su periodo de vida útil. En cuanto al servicio de agua, se instalaron 140 metros de caños de PVC, se hicieron 24 conexiones domiciliarias, 2 empalmes, se colocaron 3 válvulas y una cámara de desagüe. Por su parte, el de cloacas incluyó 140 metros de cañerías de PVC, 24 conexiones domiciliarias, 3 renovaciones de boca de registro y 2 empalmes.Todo estuvo contemplado en el plan «Redes y conexiones externas domiciliarias de agua y cloaca en zonas varias XI»
Posteriormente, se procedió a la recuperación de la calzada. Para ello, fue necesario retirar todo el material contaminado que dejaron los trabajos previos y conformar una nueva base estabilizada de 20 centímetros de espesor. Esta superficie se humectó, perfiló, compactó, niveló e imprimó. Por último, las cuadrillas distribuyeron una capa de concreto asfáltico en caliente.
Vale mencionar que las mejoras estuvieron a cargo de personal capacitado y equipamiento del moderno parque automotor local. Esta disposición de recursos propios es la inversión que realiza la comuna para mejorar continuamente el entramado vial de Guaymallén.