Hay talleres, ecocanje, emprendedores, proyectos sustentables y recorridos guiados por la empresa Reciclarg
Desde esta mañana, la Municipalidad celebra el Día Mundial del Reciclaje con una propuesta dinámica y al aire libre para todas las edades. Las actividades se realizan en la Plaza del Encuentro, ubicada en las calles Libertad e Italia del distrito Villa Nueva.
Hasta las 16, en el espacio verde podrán sumarse al ecocanje, visitar la planta de Reciclarg, participar del taller sobre reciclaje y compostaje, y recorrer los puestos de emprendimientos y de las empresas sustentables Eco Cuyum, Reciclarg, Ruggeri, Energe y Alternativa Humus.
En el marco de esta iniciativa, hasta el lunes 23 de mayo, todos los puntos verdes móviles del departamento realizarán ecocanje. Es decir, quienes acerquen sus residuos reciclables (al menos una bolsa de consorcio llena) recibirán premios ecológicos. Es importante recordar que pueden recepcionarse envases plásticos de bebidas y alimentos, cartón, envoltorios metalizados de snacks, papelería, tetrabrik, envases de vidrio, latas de aluminio, hojalata, aerosoles, telgopor, ecobotellas, tapas y envases de yogurt, cremas y postres. Todo debe estar limpio y seco. Por otra parte y, al no ser aptos para el reciclaje, no serán acopiados ni recibidos vasos y bandejas descartables, pañuelos, servilletas, lapiceras y fibras.
Reciclar: el hábito donde separar suma
El Día Mundial del Reciclaje se celebra desde el 17 de mayo del 2005 por declaración de la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura). Se trata de una fecha oportuna para tomar conciencia, repensar hábitos y recordar la relación con los residuos que se generan a partir de las actividades cotidianas. Actualmente, el error común es creer que todo es basura y, cuando ya no se necesita, se puede descartar como tal. Algo que, lamentablemente, las personas suelen hacer en cauces, acequias, en la vía pública y, en el menor de los casos, en sitios adecuados como contenedores, cestos y puntos verdes. Y eso no significa que simplemente desaparezca sin ocasionar daños al ambiente y a las personas que lo habitan. Por eso, en este contexto, resulta fundamental comprender e interiorizar que si un elemento puede darle vida a otros a partir de su reutilización no es basura, es un residuo.
Ahora, ¿cómo convertir la basura en residuos? La respuesta es simple: solo hay que separar la fracción seca y acercarla a los puntos correspondientes para su reciclaje. Esta práctica es vital porque ayuda a reducir el consumo de nuevos recursos como petróleo, agua, energía, madera, entre otros; mitiga las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera; menos materiales llegan a disposición final; facilita la labor de recuperadores urbanos y dignifica su trabajo; disminuye la contaminación ambiental y la vulnerabilidad social; crea puestos de trabajo directos e indirectos; y fomenta la economía circular como estrategia para alcanzar el desarrollo sostenible. Por lo tanto, tiene un potencial enorme para cambiar al mundo, pero necesita sí o sí de la mano y la voluntad humanas. Aquellos que deseen sumarse, pueden informarse y conocer los lugares de recepción habilitados en el sitio web https://www.guaymallen.gob.ar/dependencias-2/centro-verde/
El resto de los residuos que no son secos, pero sí orgánicos y verdes, pueden compostarse. Este proceso permite reducirlos y transformarlos en una especie de abono natural, que puede mejorar las propiedades del suelo destinado a plantas y cultivos. Se pueden compostar cáscaras y restos de frutas y verduras, yerba mate, saquitos de té o café, cáscaras de huevos, aserrín y viruta de madera. Es importante aclarar que NO aplica para carnes, lácteos, grasas, fideos, pan, filtros de cigarrillo, huesos y estiércol de animales domésticos, ya que son elementos de degradación lenta y pueden generar olores o atraer insectos. En este caso, los beneficios también son múltiples: disminuye la emisión de gases de efecto invernadero, el impacto de residuos sólidos urbanos y la pérdida de agua contenida en la materia orgánica (lixiviados); reduce el gasto de energía en la recolección y disposición de residuos por utilizar menos espacio en vertederos; favorece la regeneración del ambiente; fomenta la participación comprometida y la autoorganización de la sociedad, despertando valores como responsabilidad, trabajo en equipo y respeto integral por el resto de los habitantes y el entorno natural.
Para consultas y más información, pueden comunicarse con el 4498235, de lunes a viernes, de 8 a 19h; o enviar mail a ambiente.energia@guaymallen.gob.ar