En un acto encabezado por el gobernador Alfredo Cornejo, y el intendente de Guaymallén, Marcos Calvente, quedó inaugurado oficialmente un nuevo tramo de la obra integral del eje vial Azcuénaga–Avellaneda, una arteria estratégica que atraviesa el departamento de sur a norte y conecta los distritos de San Francisco del Monte, Villa Nueva, Belgrano y Bermejo.
La intervención es parte de un ambicioso plan de desarrollo urbano que se inició en 2016 y que ya ha transformado más de 7,5 kilómetros de esta vía histórica. Esta obra se destaca por su carácter integral: incluye pavimentación, renovación de redes de agua y cloacas, alumbrado público, reforestación, mobiliario urbano, ciclovías, veredas, esquinas inclusivas y soluciones hidráulicas para el drenaje pluvial.
Si bien la obra ya ha sido habilitada al tránsito, el Gobernador hizo una visita para ver cómo quedó la zona tras la intervención realizada por la Municipalidad de Guaymallén.
Una transformación por etapas
La obra comenzó con la renovación de calle Azcuénaga entre Elpidio González y Pedro Vargas, un tramo de 1.250 metros lineales donde se ejecutaron 11.148 m² de adoquinado, 2.377 m² de pavimento de hormigón, y más de 8.300 m² de asfalto. También se construyeron 35 puentes vehiculares, se colocaron nuevas luminarias LED, semáforos, mobiliario urbano y se reforestaron los márgenes con especies nativas.
Luego, desde 2018, se continuó con calle Avellaneda en varios tramos consecutivos:
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Desde Lateral Norte del Acceso Este hasta Benavente (550 m).
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Desde Benavente hasta las vías del Ferrocarril General Belgrano (730 m).
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Desde Virgen de las Nieves hasta Canal Lagunita (1.150 m).
Cada una de estas etapas replicó el enfoque integral, sumando pavimento, alumbrado, cloacas, agua potable, veredas y señalización, con importantes mejoras en seguridad vial y peatonal.
En 2021 se realizó la cuarta intervención, en coordinación con el Plan Maestro de Drenajes Urbanos junto a la Secretaría de Recursos Hídricos de la Nación. Se revistió un canal de riego de 1.200 metros y se ejecutó un bulevar con iluminación central, consolidando el nuevo perfil urbano de calle Avellaneda.
Última etapa e inversión histórica
La quinta etapa abarcó el tramo desde Canal Lagunita hasta Mathus Hoyos, incluyendo en esta última arteria un segmento desde Gallardo hasta Aristóbulo del Valle. Se construyó una rotonda clave en la intersección con Avellaneda. Esta intervención, ejecutada durante 28 meses y atravesada por la pandemia de COVID-19, significó una inversión superior a los 2.800 millones de pesos.
El intendente Marcos Calvente dijo que “estamos en una de las obras más ambiciosas que se ha llevado adelante en el departamento de Guaymallén en los últimos años. Es la intervención integral del eje Azcuénega-Avellaneda, una intervención que contempla la renovación de redes de agua, redes de cloacas, los drenajes, las veredas, el alumbrado público y la incorporación de ciclovías y también las esquinas inclusivas. Estas distintas intervenciones han llevado siete años y seis tramos de obra en 7 kilómetros de desarrollo que cruzan el departamento de San Francisco del Monte hasta Matus Hoyos. Son intervenciones que han buscado renovar la infraestructura urbana, pero también generar condiciones de seguridad ciudadana y seguridad vial».
El intendente dijo que «para finalizar lo planificado, nos queda el ensanche del puente de calle Avellaneda sobre el canal Lagunita». Al respecto, en mayo comenzarán a formular el proyecto para el nuevo puente sobre el Canal Lagunita, con el objetivo de resolver una deuda histórica en materia de seguridad peatonal, ya que actualmente solo cuenta con espacio para dos vehículos.
En paralelo, se avanza con la intervención urbana de calle Avellaneda entre Godoy Cruz y Capilla de Nieve, donde se construye un nuevo bulevar con espacios verdes, nueva iluminación, y cruces peatonales más seguros.
Un eje estructural para Guaymallén
La obra del eje Azcuénaga–Avellaneda representa un avance fundamental para la conectividad del departamento. Con su trazado casi completamente intervenido, Guaymallén se prepara para dar el próximo gran paso: cruzar la Ruta Nacional Nº 7 mediante una tercera trocha proyectada, que permitirá la unión total entre el sur y el norte del departamento.
“Esto no es solo pavimento, son calles que ordenan el tránsito, mejoran la seguridad vial, conectan barrios y elevan la calidad de vida de miles de vecinos”, destacaron las autoridades.