Junto a una multitud, este lunes cerró la tercera edición del encuentro que promueve una experiencia única vinculada a la gastronomía y los vinos espumantes
Desde el sábado pasado, Guaymallén volvió a vivir el Paseo de las Burbujas y Sabores del Mundo, evento declarado de Interés por la Cámara de Diputados. Con epicentro en el Boulevard Dorrego, la gastronomía recorrió el mundo acompañada por los vinos y espumantes de bodegas locales.
Este año, el encuentro sumó un atractivo por demás convocante. Durante las tres noches, el predio ubicado entre Amado Nervo y Moldes congregó a miles de personas en un circuito guiado de producción y degustación, que invitó a recrear y conocer el proceso de elaboración vitivinícola. En la posta final, los participantes pudieron tomarse fotografías instantáneas para llevarse de recuerdo.
Con precios accesibles, los food trucks y las colectividades de Brasil, Grecia, España, México, Siria, India, Arabia, Tailandia, Italia, Japón, Alemania, Ecuador, Argentina, Bolivia, Perú y Colombia ofrecieron una amplia variedad de platos típicos, que los paseantes pudieron disfrutar en las mesas y livings apostados a lo largo del espacio verde.
Estos sabores mundiales fueron maridados con los vinos y espumantes de distintas bodegas locales. En esta edición, participaron Cava Rimé, Barberis, Valencia, Amadeo Marañón, Angelado, Mainque, Uva Negra y Ananías.
También, el wine truck La Espumosa.
Guaymallén, tierra de artesanos, emprendedores y productores
Cerca de 40 puestos de artesanías se desplegaron desde Moldes hasta Castellanos, con creaciones en pintura, madera, cerámica, cuero, indumentaria, fragancias, bijouterie y exquisiteces dulces.
Además, el Paseo de los Productores volvió a reunir a la Cooperativa Apícola Alhué, Pierino, Capsicum, Frambuesa, Familia Minotto y Tía Clara.
Por su parte, el espacio personalizado de Guaymallén Emprende exhibió las propuestas sustentables e innovadoras de Cenergia, Diestra Calzado, Saludablemente, Hecho a tu medida y Good to eat.
Mención aparte merece el sector de Educación Vial que, con el objetivo primordial de concientizar, invitó a recorrer las pistas señaléticas pedagógicas y a vivir una experiencia real de manejo junto a los simuladores de conducción virtual y las gafas de 360°.