Este jueves tuvo lugar la apertura de la muestra “Hoshi”, compuesta por pinturas de la artista visual Susana Choren, en Salas de Arte Libertad. La exposición estará disponible hasta el 29 de noviembre y podrá ser visitada de lunes a sábados de 8:30 a 19h, y domingos de 9 a 13h, en Libertad 466 de Villa Nueva. La entrada es gratuita.
El evento contó con la actuación de los alumnos de la Orquesta Escuela Juvenil de Guitarras del Municipio, dirigidos por Hugo Budini y Adrian Santi.
Sobre la protagonista
Susana pinta y escribe a tiempo completo. Su vida se divide entre dos pasiones: el pincel y la pluma. Estos elementos escarban en su interior y, en esa actividad aparentemente caótica, surgen los cuadros y los cuentos que le permiten descubrir paisajes internos: espacios abstractos, personajes y mensajes inesperados.
Su vocación de artista visual la llevó a realizar talleres investigando composición, color y lenguajes con Teresa Pensado, Octavio Joaquín Tapia, Raúl Castromán, Verónica Anastasi y Magalí Riera. Actualmente, en el taller de Guillermo Garrido se sigue perfeccionando y busca ponderar los temas que la inquietan. También ha incursionado en el modelado y color en talleres de cerámica.
Se graduó como Licenciada en Sociología en la Universidad Nacional de Cuyo, en 1975, y fue becada por la Organización de Estados Americanos. Se desempeñó como profesora universitaria e investigadora científica.
Está comprometida con las mujeres, la libertad, la ecología, la paz, los derechos humanos, las medicinas complementarias y el desarrollo de tecnologías alternativas. Se capacitó como mediadora apostando a las nuevas formas de diálogo para superar los conflictos. Le interesa la terapéutica gestáltica y transpersonal.
Palabras de la autora
“Mi mente es un fantástico sujeto de arte que nunca está en pose para que yo la dibuje y la pinte. Siempre está haciendo otra cosa, mientras yo trato de fotografiar un momento en mi interior. Al pintar distorsiono la realidad para expresar mis propias emociones, sentimientos e ideas al estilo expresionista. Mi subjetividad opera sobre el mundo de los objetos reconstruyéndolos o deformándolos.
Desde el doloroso hueco de mi existencia, desde ese agujero de la carencia, empiezo a pintar buscando la felicidad, la satisfacción y el sentido de la vida. Así comienzan a abrirse extrañas puertas por las que entro con desconcierto y voy descubriendo mis paisajes internos que son metáforas de mundos desconocidos. Dibujo imágenes que me parecen los símbolos del lenguaje de mi inconsciente personal. Lo psíquico queda así plasmado en un lienzo, en una base sólida de dos dimensiones. En esos dibujos y pinturas voy reconociendo y experimentando el contrapunto de mi razón y mi pasión.
El ideal de continuidad no está en juego para mí. Yo no pienso en eternidades sino sólo en instantes. Con la pintura soy una coleccionista de momentos, de escenas y de personajes. No hablo de proyectos, sino sólo de deseos”.